El amor no tiene límites ni condiciones. El amor se expresa, se siente. No se compra ni se vende.
Si sufres,no amas. Cuando nuestro interior se llena de paz y nuestro alrededor de armonía, querrá decir que estamos en el buen camino.
Aunque las películas de Hollywood y las canciones románticas nos hacen creer que el amor es un sentimiento, la realidad es que eso es solamente un mito. En realidad, amar es tomar la decisión firme de apoyar el máximo bien de quien amamos. A pesar de que podamos sentir algo muy desagradable hacia otra persona, el amor implica seguir buscando el máximo bien para los demás y para nosotros.
Amar no es fácil, requiere aprendizaje y entrenamiento. No podemos actuar siempre en función de lo que sentimos. Nadie puede darte amor si no sabes qué significa. Si no sabes italiano, no puedes hablarlo. Así funciona el amor. Pues, si no tienes amor, tampoco puedes compartirlo con los demás. Algunas personas esperan que los otros les den amor, pero esto es imposible. Solamente tú puedes despertar esa capacidad en tu interior.
El amor implica comprender que cada persona siempre hace lo que puede y que no importa quién o qué sea, siempre podemos apoyarle para que sea feliz. El amor te permite amar a cualquier persona no dependiendo de su color de piel, de su religión, de sus costumbres, de su género o de su orientación sexual.
Deberíamos reconocer que el amor nace en nosotros y no se encuentra fuera. El amor es misterioso y peligroso a la vez. Nunca sabes qué pasará ni cómo, pero quien no arriesga, nunca gana. Cuando salgamos de nuestra cabeza y entremos en nuestro corazón, estaremos listos para amar realmente.
Deja que la gente se enamore de ti y no de la imagen que les vendes.
¿Cómo pueden quererte realmente si no les muestras tu verdadero tú?
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