Todo
el mundo sabe cómo es la Tierra viendo desde el universo. Ahora olvídalo todo e
imagina un planeta totalmente azul: es el océano. Pero puedes ver un puntito
pequeño. Desde esta distancia no se puede decir qué es exactamente, pero desde
el cielo, sentando en las nubes vemos, que es una isla pequeña. En esta tierra
puedes encontrar una casita, en la casa una cama, y en la cama un chico dormido
que se llama Marco.
Antes
él fue la única persona que vivía aquí, con sus juguetes, pasando sus días
haciendo cosas que él quisiera, dibujaba, cantaba, leía cuentos, construía
castillos de arena en la playa de su isla. Su vida fue un sueño de todos los
niños. Pero él no fue tan feliz, porque se sentía solo. Un día alguien llamó a
la puerta, y cuando Marco la abrió, vio un chico con pelo corto y negro que
llevaba gafas, fue un poco bajo, gordito, pero tenía una sonrisita que te hacía
reír. Se llamaba Alex. Ellos se hicieron muy buenos amigos. Marco fue el caballero
en su reinado que no tenía miedo nunca y Alex fue su fiel soldado.
Una
vez Marco escuchó una voz y esta voz le obligó a volar. De repente aparecieron
dos alas en su espalda, y empezaron a llevarle hacia al cielo. No tenía ni
tiempo para saludar a Alex porque esta voz no le dejaba en paz. Un minuto
después, Marco estaba es su cama, en su casa, en el mundo real, con todos los
continentes de la Tierra. La isla desapareció con su mejor amigo. Cuando abrió
los ojos veía su madre en la habitación oscura mientras ella acariciaba su
espalda. Marco necesitaba unos minutos para realizar que su mundo perfecto solo
fue un sueño. Estaba un poco triste, pero sabía que este día no fue para estar
deprimido. ”Hoy estaré muy feliz, porque esto será mi primer día en la escuela.”-pensaba.
Con estos sentimientos comió su desayuno y se vistió.
Durante
el camino hacia la escula estaba un poco nervioso, pero cuando entró en la
clase, ya no sentía nada solo felicidad y curiosidad. Se sentó y esperaba. Unos
minutos depués alguien se sentó a su lado, y Marco se quedó parado con bocas
abiertas, porque la persona que estaba allí, fue Alex, su mejor amigo, su fiel
soldado.
Desde
este momento fueron inseparables, y mejores amigos para toda la vida.
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